sábado, 15 de agosto de 2020

Lecturas de fin de semana: Dante Elefante / Ferréopolis / Nico & Miko / D.E.S.Pareja

Continuando con la lectura de los libros abanderados por la premisa de Banda Dibujada, hoy toca leer cuatro títulos que a pesar de ser todos de J. J. Rovella no se pueden relacionar entre sí dada la versatilidad del autor a la hora de darles vida.


Dante Elefante


Este libro, tercer volumen de la Colección Aventuras Dibujadas, fue el primero que recopiló material protagonizado por el paquidermo mudo, mucho antes que Ediciones de la Flor hiciera lo suyo al respecto. Básicamente la temática es la misma: chistes y planteos gráficos mudos (la especialidad de Rovella) donde el ingenio y el absurdo van de la mano. Como corresponde a un protagonista que habla, sus compañeros de elenco mantienen la misma intención de rima en sus identidades: Hugo Tortugo y Olegario Canario. También se destacan un par de historias de varias páginas de extensión cada una, prueba evidente de que Dante podría estar a al cabeza de relatos ambiciosos sin ningún problema. Es más que obvio que un personaje así haya logrado ser publicado en las páginas de Spirou, nada menos.





Ferreópolis



Este fue el primer y único volumen de una serie que prometía mucho. En una ciudad cuya sociedad se compone de robots y animales mecánicos, Benjamín se siente diferente respecto a su familia, a tal punto que un hallazgo arqueológico puede convertirse en la fuente de las respuestas que ha estado buscando sobre sí mismo. Aunque tiene chistes y vueltas humorísticas para suavizar el relato (incluso un cameo "mecanizado" de Dante Elefante), es tierna y emotiva, especialmente a medida que va culminando el relato. Es una lástima que La Vuelta al Globo nos haya quedado debiendo con nuevas entregas de esta historia, cuyo final abierto invita a seguir leyendo.





Niko & Miko



Ya de la mano de ¡Toing! Colección nos llegan dos títulos más, el primero de los cuales me supone el más ambicioso de esta reseña en cuanto al modo narrativo. El dúo protagonista, astronautas de profesión, aterrizan en un planeta donde dos especias distintas pelean entre sí: unos de forma cúbica contra otros de forma esférica. Desde luego, apenas llegan al lugar quedan accidentalmente involucrados en los acontecimientos de dicha antinomia, lo que dará lugar a diversas situaciones de enredos, confusiones  y situaciones tan inverosímiles como hilarantes. Ojalá los responsables de Comiks Debris le den cabida a posibles secuelas de este dúo, sea dentro de ¡Toing! o de sus Especiales.






D.E.S.Pareja



Cerramos la lectura de hoy con el título 13 de ¡Toing!, en el cual Rovella cede la responsabilidad gráfica a un colega y amigo, Javier Suppa. Y es irónico, porque el personaje pergeñado para esta historieta no cree en trabajos de equipo, optando por el desempeño solitario... a pesar de que la agencia de vigilancia y protección de para la que trabaja insiste en el trabajo en parejas. Lógicamente, en cada aventura tendrá una pareja que nunca estará a su altura... una forma elegante de decir que cada vez que intenta actuar en dúo siempre ocurren cosas inesperadas. El libro está partido en dos mitades bien diferenciadas en lo argumental: en la primera la acción de cada historia se narra en dos páginas autoconclusivas, mientras que en la segunda se desarrolla una aventura más compleja (por no decir más hilarante). Y como no podía ser de otra forma, el ingenioso autocameo con el que los autores meten mano en el desarrollo de la historieta.





Y eso es todo por ahora. La próxima semana, más libros de estas colecciones para reseñar.

sábado, 8 de agosto de 2020

Lecturas de fin de semana: Monsterville / Boris el virus / El Chispa


Otra semana, más libros para leer bajo la premisa de Banda Dibujada de fomentar la lectura y difusión de historieta infantil y juvenil. Y esta semana le toca el turno a tres títulos dispares entre sí.


Mosterville


Irónicamente, este título de la Colección Aventuras Dibujadas se adelantó en casi una década al espíritu alocado de las películas animadas de Hotel Transylvania. Sin embargo, su premisa es claramente diferente: los humanos que irán al castillo donde transcurre la historieta son tres niños que lo heredan de su difunto tío. Y los monstruos que lo habitan no solo no los quieren, sino que buscarán deshacerse de ellos de cualquier modo posible en los siete episodios recopilados. Y volviendo a lo anterior, el titulado Monsterville Hotel hace reír a carcajadas por la involuntaria comparación.

Con guiones de Jorh y dibujos de Diego Parés, Monsterville sorprende por el ingenio de sus diálogos a la par de la faz gráfica, la cual no da respiro y obliga al lector a una segunda lectura para no omitir detalles que pueden pasar desapercibidos... y no sorprende que el lector quiera realizar esa segunda lectura.


La presentación de los personajes del libro; cualquier semejanza con héroes galos, vivos o muertos, es pura coincidencia.





Boris el virus


Del cuarto libro de la Colección Aventuras Dibujadas pasamos al octavo, en el cual Jorh es el único responsable. En este caso, la sutileza con la cual el título deja en claro la simpatía que tendrá el lector por el personaje protagónico es explícita. Y más si tomamos en cuenta que el protagonista es un personaje que en la vida real ni sería simpático ni causaría ninguna alegría.

Realizada al mejor estilo del comic-strip americano, Boris es un virus que aparece infectando la computadora de Darío, el chico que lo adoptará como mascota. Una vuelta de tuerca original considerando que la tira es de finales del siglo pasado, cuando el temor a los virus informáticos era una novedosa realidad en esos tiempos. Lo más "natural" a destacar es la convivencia que tienen los humanos con el protagonista y sus amistades, como si fueran una parte normal del entorno de uno... en estos precisos momentos más de uno debería prestarle atención a este libro.






El Chispa

Cerramos esta entrada con el otro libro editado por La Vuelta al Globo, con un héroe conocido por los chicos que lo descubrieron en las páginas del periódico Crónica y por los no tan chicos en la página web de Comiqueando.

El Chispa es más legendario por su vida comercial que por su andadura en los formatos que le tocó vivir. La propuesta de Gustavo Secreti fue difundir a este héroe adolescente del Conurbano Oeste de manera masiva y no convencional para acercar la historieta a quienes no tuvieran acceso a su lectura, sin importar las razones existentes; por tal motivo llegó a aparecer en medios gráficos de difusión gratuita en simultáneo con su presencia en Internet. Parte del contenido de este libro está compuesto por dicho material, el cual cuenta con el arte de Gustavo Lucero.

Debido al mínimo espacio disponible en cada entrega, cada página presenta una situación autoconclusiva, aunque en algunos casos se pueden ver historias serializadas. Pero así y todo el planteo en cada una permite el desarrollo e interacción de los personajes. Además del protagonismo de Leo, se destaca la presencia de Zonda, héroe cuyano cuya existencia data de un especial en papel de la extinta Comiqueando Press. Otro tema a destacar es que parte de la "chapa" que tiene Leo se debe a la concientización que plantea en los lectores ante algunas situaciones, sin caer en la redundancia moralista que se puede observar en las series animada de antaño.



Y eso es todo por esta semana. La próxima, más libros.

sábado, 1 de agosto de 2020

Lecturas de fin de semana: Todo Tiburcio (hasta ahora)

Dedicatoria a cargo de los autores, de la Feria del Libro 2013. 


Como indiqué alguna vez, reseñaré la totalidad de libros aparecidos entre cinco editoriales que se unen a la misma premisa: adherirse al compromiso de Banda Dibujada por desarrollar y fomentar la lectura de historietas para público infantil (y no tanto). Un esfuerzo que ya superó una década de existencia, con varios logros en su haber, como lo prueba la treintena de libros editados que leí con gran placer y cuyas reseñas empieza con un personaje ya conocido por el público: Tiburcio.


Tiburcio 1 y 2




Batracio Ediciones fue el esfuerzo de autoedición que Diego Greco y Alejo Valdearena encararon para poder llevar al personaje salido de Poco y Nada de la efímera vida de la revista Viva a la permanente presencia en nuestras bibliotecas. De formato apaisado (21 x 15 cm.), la lectura de ambos títulos involucra una tira por cada dos páginas, respetando así como era publicada originalmente en la mitad superior de dos páginas de la revista dominical, cuya mitad inferior era usada para mensajes educativos / de conciencia a los lectores basados en la tira, o para ilustrar a lectores que participaran de las consignas impulsadas en cada edición. Retrospectivamente, esta diagramación permite disfrutar más el arte y planteo gráfico implicado en cada entrega de la historieta, pero hoy todo este material más el que se recopiló en el tercer volumen de este personaje podría editarse en un solo título, remontando las tiras para adaptarse al formato de álbum reducido (24 x 17 cm.) que componen las otras ediciones que verán más adelante. Es una idea que podría funcionar en un futuro cercano, dado que Batracio Ediciones ya no existe y Tiburcio merece su supervivencia en el imaginario popular. Ambos libros incluyen sendos poemas ilustrados a modo de bonus en sus páginas finales: uno protagonizado por el Gaucho Zombie en el primero, y el titulado Fané y desconectado, basado en las últimas tiras de Tiburcio 2.



La premisa es básica y funcional: todo gira en torno a la vida de Tiburcio. Sus amigos, su afición por el Gaucho Zombie, su amor aparentemente imposible por Abril, sus padres, su mascota Batracio, la escuela, etc. Por momentos los diálogos y situaciones se aproximan bastante a leer Mafalda, pero los autores ponen sus recursos a full para que la historieta tenga su propio vuelo e impronta.





Tiburcio en concierto / Tiburcio se pone mimoso




Ya de la mano de Comiks Debris el niño dientudo pudo tener más presencia en las bateas de librerías y comiquerías como parte de Los especiales de ¡Toing! Colección. Tiburcio en concierto respeta el formato apaisado con las características ya enumeradas con las últimas tiras aparecidas en Viva, mientras que Tiburcio se pone mimoso adopta el formato habitual de ¡Toing!, debido a que recopila parcialmente el material publicado en la revista Billiken. También se incluyen poemas ilustrados como bonus protagonizados por el Gaucho Zombie: Zombie sin esperanza, una versión libre de Zamba de mi esperanza, y El Gaucho Zombie y el Lobizón, con el recurso de tapa flip para que tenga su propia portada y orientación de lectura del libro.



En esta última etapa de la historieta su evolución nos permite seguir viendo; lamentablemente, la situación que atraviesa Billiken causó que Tiburcio quedara nuevamente trunca, con un parate que todavía sigue. Ojalá el tiempo nos permita verlo de nuevo en alguna publicación y/o en futuros nuevos títulos de Tiburcio, ya que su público merece verlo vivito y activo en las librerías.