Allá por 1989 la industria del cine se convulsionó por completo ante el estreno del largometraje Batman. Dirigido por Tim Burton y realizado por Warner Brothers, dejó de lado las "bati características" que definieron al personaje del comic durante décadas en la pantalla chica o grande: historias flojas, villanos cursis o histéricos, el tener que soportar a Robin y sus "Santos (lo que sea), Batman", etc. Fue la primera vez desde las películas de Superman de la década del '70 que se buscaba una versión fílmica que respetara la esencia del personaje tal como se la leía en los comics, y cambió para siempre la manera de encarar la adaptación a la pantalla grande de personajes del género superheroico.
Como es costumbre, cuando se estrena una película sobre superhéroes, la editorial que lo publica saca a la venta un Comic Oficial de la Película, y obvio, DC Comics no dejó pasar la ocasión. Con guión de Dennis O’Neil, dibujos de Jerry Ordway y colores de Steve Oliff, es un comic muy bien logrado, impregnado con el ambiente oscuro y escabroso de la película.
En diciembre de ese año, la editorial Perfil publicó dicho comic en nuestro país, generando una buena acogida entre los lectores y sentando las bases del sub-sello DC/Perfil, que durante seis años generó miles de lectores de historietas en toda la Argentina, a los cuales les dejó una huella imborrable en sus infancias (incluida la mía), al punto de referirnos a nosotros mismos como la "Generación Perfil".
Ahora, a tres décadas de esos sucesos, les propongo revisitar ese comic; y a los que no leyeron nunca, aprovechen la oportunidad para conocerlo. Que lo disfruten.
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