Parece mentira, pero este ogro verde lleva dos décadas recorriendo un amplio camino que lo llevó desde las páginas de un libro infantil a dar el salto a la pantalla grande, en un viaje fílmico que hoy llega a su fin. Esta es su historia.
Un ilustrador insatisfecho
William Steig nació en Brooklyn, Nueva York, el 14 de noviembre de 1907, en el seno de una familia de polacos judíos. Sobre su formación dijo una vez: "Mis padres no querían que sus hijos se convirtieran en jornaleros, porque seríamos explotados por los empresarios, y no querían que nos convirtiéramos en empresarios, porque entonces explotaríamos a los trabajadores. Como no nos podíamos permitir estudiar una profesión, nos animaron a ser artistas". Esto se debía a la influencia familiar, de pensamiento socialista.
Con un talento innato para el dibujo humorístico, tenía apenas 23 años cuando quedó incorporado al staff de la prestigiosa revista The New Yorker, en donde se destacó con sus "dibujos simbólicos", viñetas que expresaban estados de ánimo.
Su estilo de humor era tanto visual como verbal, y los personajes que retrataba solían ser chicos y adolescentes de la calle, que se mantenían a raya de la forma de pensar y actuar de los adultos. Quienes trabajaron en esa revista afirman que él le facilitó el camino a las siguientes generaciones que publicaron sus trabajos allí.
Entre 1930 y 2000 Steig publicó más de 1600 dibujos y viñetas humorísticas y 117 portadas de The New Yorker, que fueron recopiladas en varios libros. Más adelante revolucionó la manera de crear tarjetas de felicitación, cuando se le concedieron licencias sobre sus dibujos simbólicos para figurar en servilletas, vasos y tarjetas de cóctel.
A fines de la década de 1960, Steig comenzó una nueva carrera como dibujante de libros para niños, que el mismo escribía. La idea era narrar historias fantasiosas, recreando el ambiente de las viejas fábulas y cuentos de hadas, protagonizados por animales, usualmente asnos y cerdos. Llegó a escribir y dibujar 25 libros.
"Puedo relajarme con los niños. Son auténticos y me gusta pensar que mantuve una parte de inocencia", explicó Steig para justificar su preferencia, en las últimas décadas del siglo, por los libros infantiles a sus trabajos humorísticos.
Su libro más famoso, y que acrecentó más su reputación, fue Shrek!, publicado por primera vez en 1990. Dicho libro narra las aventuras de Shrek, un ogro verde, antisocial, grosero y malhumorado, que parte del pantano en que vive para buscar novia, con la ayuda de un burro molesto con el que hace amigo.
¿Quién hubiera pensado que a los 83 años de edad había encontrado al personaje que lo inmortalizaría?
Nace una estrella
Shrek ganó popularidad entre los niños estadounidenses durante la época de 1990, y fue elegido por la compañía cinematográfica DreamWorks para protagonizar su propia película animada, la cual lleva su mismo nombre.
Luego de su creación, DreamWorks arrasó los cines con tanques taquilleros como El Pacificador (1997), Rescatando al soldado Ryan (1998) y Gladiador (2000). En el campo de animación supo dar batalla a The Walt Disney Company, al estrenar los largometrajes de animación tradicional El príncipe de Egipto (1998), Joseph: King of Dreams (2000) y El camino a El Dorado (2000), y el largometraje de animación computarizada Antz (1998); además distribuyó el largometraje animado inglés Pollitos en fuga (Aardman Animation Studios, 2000). Antz fue un éxito de taquilla, razón por la cual se decidió continuar con la producción de películas de animación computarizada, para lo cual se abocaron a tiempo completo en la realización de Shrek.
Los personajes fueron creados a partir de muñecos modelados en arcilla, los cuales fueron fotografiados digitalmente con el fin de basar las animaciones en ellos. Los treinta y seis escenarios fueron recreados con la ayuda de maquetas, que fueron reproducidas del mismo modo. Fueron necesarios 275 animadores para darle vida a los personajes y desarrollar los detalles presentes en los escenarios. Las técnicas de animación computarizada desarrolladas por DreamWorks para Antz fueron mejoradas con el fin de dotar de mayor realismo a los efectos de luces y sombras utilizados en el film, así como los efectos que representan la aparición de los elementos de la naturaleza (agua, pasto, fuego, lava, etc.).
Ted Elliott, Terry Rossio, Joe Stillman y Roger S.H. Schulman adaptaron la historia original de William Steig, y fue dirigida por Andrew Adamson y Vicky Jenson, quienes por primera vez se pusieron al frente de una película de animación.
La película está protagonizada (obviamente) por Shrek, un ogro verde, calvo (en el cuento de Steig lucía un poco de pelo rojo en la nuca), gordo y el doble de volumen que un humano normal. En el film se hace amigo (muy a su pesar) de Burro, que como su nombre lo dice, es un burro... aunque puede hablar (y mucho), es molesto y no sabe quedarse quieto y callado. Lord Farquaad es el villano de la película: un noble que aspira a ser coronado rey de Duloc, y para que su reino sea perfecto (todo debe ser perfecto, aunque él sea petiso) decretó la expulsión de los personajes de los cuentos de hadas, los cuales fueron reubicados en el pantano donde vive Shrek. A fin de recuperar lo que es suyo, el ogro, con la ayuda de Burro, debe rescatar a Fiona, una princesa pelirroja y de mal carácter que vive recluida en un castillo que está custodiado por una feroz dragona... además de ser víctima de un cruel hechizo: por las noches se convierte en una ogresa, por lo menos hasta que reciba un beso de su verdadero amor, para luego adoptar la forma de este.
El elenco contó con reconocidos actores para interpretar a los personajes. Mike Myers, conocido entonces por interpretar a Austin Powers, fue convocado para interpretar a Shrek. Años después comentó que la voz del ogro es una caracterización del modismo escocés, al estilo del actor Sean Connery. El papel de Burro quedó a cargo de Eddie Murphy, y Cameron Diaz interpretó a la Princesa Fiona. John Lithgow interpretó a Lord Farquaad, y las otras voces quedaron a cargo de Vincent Cassel (Monsieur Hood), Conrad Vernon (Jengi, el Hombre de Jengibre), Chris Miller (Espejo Mágico), Cody Cameron (Los Tres Cerditos y Pinocho) y Val Bettin (Obispo).
Con un presupuesto de U$S 60.000.000, Shrek se estrenó en cines el 18 de mayo de 2001, generando ganancias estimadas en U$S 484.409.218 y ganándose la aprobación del público y de la crítica especializada, que la vio como "una excelente reinterpretación del clásico cuento clásico de hadas, en donde esta vez el ogro es el héroe". Los directores de Shrek hicieron una película que marcó un antes y después en la historia de animación: Shrek fue la primer película de animación que participó en la sección oficial del Festival de Cannes, y en 2002 se convirtió en la primera película en ganar el Oscar al Mejor Largometraje Animado, ganándole a Monsters, Inc. y Jimmy Neutron: Boy Genius; además fue nominada como Mejor Guión Adaptado. También fue nominada al Globo de Oro a la mejor película - comedia o musical; y candidata a 6 premios BAFTA, ganando uno solo, por Mejor Guión Adaptado.
Y sigue el éxito
El éxito de Shrek hizo que DreamWorks Animation se lanzara a crear varias secuelas, introduciendo nuevos personajes y creando argumentos más complejos.
Luego del estreno de la primera película, salió a la venta el DVD con un extra: Shrek 3D, un corto que sirve como anexo de la película. En él vemos a Shrek y Fiona, casados y de luna de miel, con Burro en el medio (como siempre), y una nueva aparición de Lord Farquaad, que planea una postrera venganza fantasmal contra los tortolitos. El mote "3D" del título se debe a que junto al DVD se vendían unos anteojos para ver el corto en tres dimensiones, un lujo para la época.
A todo esto se trabajaba a toda máquina para crear la secuela del film. Shrek 2 fue nuevamente dirigida por Andrew Adamson, junto con Kelly Asbury y Conrad Vernon; además, Adamson escribió el argumento y el guión, junto a J. David Stem, Joe Stillman, David N. Weiss. Y como si eso no fuera todo, también se dio el lujo de poner su voz al capitán de la guardia del palacio de Muy, Muy Lejano, el reino donde transcurre la mayor parte de la película.
Esta secuela cuenta básicamente como Shrek y Fiona deben acudir al reino de Muy, Muy Lejano para comparecer ante los padres de ella, el Rey Harold y la Reina Lillian, para que ellos aprueben el matrimonio. Como es de esperarse, Burro los acompaña en el viaje. A todo esto, Harold debe responder a las exigencias de la Hada Madrina, quien quiere deshacerse del ogro para que Fiona se case con su hijo, el Príncipe Encantador.
El elenco se completa con el personaje que faltaba, que además resultó ser el más memorable: el Gato con Botas, contratado por el rey Harold para liquidar a Shrek, pero estos terminan aliándose, y junto con Burro llegan a la fábrica de Hada Madrina para lograr una mediación. Luego de crear algunos líos, se roban un brebaje mágico, según la cual los que realmente se aman serán felices y guapos por siempre.
Al igual que la primera película, Shrek 2 contó con un amplio reparto de voces: a los personajes habituales se sumó Antonio Banderas interpretando la voz del Gato con Botas: no solo en inglés, sino también en italiano y español (tanto para el doblaje de España como para el de Latinoamérica).
La reconocida Julie Andrews (¿quién no ha visto Mary Poppins alguna vez?) puso su voz para la Reina Lillian, y John Cleese hizo lo mismo para el Rey Harold. Jennifer Saunders, comediante que actuó en series de la talla de Roseanne y Friends fue elegida para el papel de Hada Madrina, y Rupert Everett interpretó al Príncipe Encantador. Otras voces quedaron a cargo de Aron Warner (Lobo Feroz), Tom Waits (Capitán Garfio), Chris Miller (Espejo Mágico), Cody Cameron (Pinocho y Los Tres Chanchitos) y Christopher Knights (Los Tres Ratones Ciegos).
Merecen una mención aparte los aportes de Joan Rivers, que hizo de sí misma en la escena de la alfombra roja, y Larry King, que interpretó a Doris, la Hermanastra Fea. Además, el co-director Conrad Vernon hizo las voces de Jengi, el Hombre de Jengibre, El Panadero, Mongo y Cedric.
Shrek 2 contó con un presupuesto mayor, U$S 150.000.000, generando a su vez U$S 919.838.758 de ganancias, lo que la convirtió en la más exitosa de las películas del personaje. Además, las técnicas de animación contaron con la novedad de tener un mayor realismo en los escenarios y en el movimiento facial y capilar de los personajes (el cabello del Príncipe Encantador parece real), esto se debió a una alianza comercial entre DreamWorks Animation y Hewlett-Packard, lo que permitió compartir recursos y tecnología de avanzada. Recibió dos nominaciones para los Oscars a Mejor Película de Animación y Mejor Canción.
Legado
William Steig vivió lo suficiente para ver como uno de sus personajes se ganó el cariño y la aprobación del público en todo el mundo. Murió en su casa, en Boston, Estados Unidos, el 3 de octubre de 2003, a los 95 años de edad, de causas naturales. Shrek 2, que fue estrenada en el Festival de Cannes el 15 de mayo de 2004, fue dedicada a su memoria.
El 18 de mayo de 2007 se estrenó Shrek Tercero (Shrek the Trird) con un presupuesto de U$S 160.000.000 y ganancias de "apenas" U$U 798.958.162. El mote "tercero" no se debe al tema de la película (la posibilidad de que el ogro se convierta en rey), sino a la necesidad de que el público no confunda esta película con el corto Shrek 3D.
Además de los personajes ya mencionados, se suman al elenco el príncipe Arturo (Arthur "Artie" Pendragon, voz de Justin Timberlake), el mago Merlín (voz de Eric Idle), Blanca Nieves (Amy Poehler en los diálogos y Megan Hilty en las escenas musicales), Rapunzel (Maya Rudolph), Cenicienta (Amy Sedaris) y La Bella Durmiente (Cheri Oteri). En esta ocasión fue dirigida por Chris Miller y Raman Hui, sobre guión de Jeffrey Price, Peter S. Seaman, J. David Stem, Joe Stillman, David N. Weiss y Jon Zack. La música volvió a estar a cargo de Harry Gregson-Williams.
Esta fue quizás la más dramática de las películas de la saga, ya que tocó temas que por lo general son difíciles de tocar en una película infantil: la escena de la muerte del rey Harold estuvo bien tratada, aunque tal vez se va un poco de tema cuando los sapos se ponen a cantar Live And Let Die...
Durante las Fiestas de 2007 se estrenó el especial televisivo "Shrek ogroriza la Navidad" (Shrek Halls), explicando como es la primera Navidad de Shrek como jefe de familia.
Ahora se espera en Argentina el estreno de la última película de la saga, la cual lleva por título Shrek para siempre (Shrek Forever After). Con un presupuesto de U$S 165.000.000, lleva ganados en el planeta (hasta ahora) U$S 323.384.360, con lo que promete ser (por lo menos) tan taquillera como Shrek 2. Como novedad, esta es la primera película de Shrek que se estrena en salas equipadas con proyección en 3-D e IMAX.
Dirigida por Mike Mitchell y producida por Gina Shay, Teresa Cheng, Andrew Adamson, Aron Warner y John H. Williams, está guionizada por Josh Klausner y Darren Lemke y musicalizada una vez más por Harry Gregson-Williams.
El argumento plantea como Shrek siente nostalgia por los días en que espantaba a todo el mundo, siendo temido y respetado en aquel entonces. Esto plantea la aparición de Rumpelstiltskin (voz de Walt Dohrn), quien le tendrá una trampa a Shrek que podría cambiarlo todo para siempre...
Hasta acá llega la historia de nuestro ogro favorito, después de veinte años de asustar (más bien divertir) a su público. Habrá que ir al cine y ver cómo termina la historia... y así ser feos para siempre.
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